El uso de un teléfono móvil propiedad de un Ayuntamiento para la campaña electoral de un partido político puede ser considerado como malversación de fondos públicos, ya que implica la utilización de un recurso que pertenece al patrimonio público para fines distintos a los previstos por la ley.
La malversación de fondos públicos es un delito que se comete cuando un funcionario público utiliza de manera indebida fondos o recursos que están bajo su custodia y responsabilidad. En este caso, si un funcionario público utiliza un teléfono móvil propiedad del ayuntamiento para su campaña electoral, estaría utilizando un recurso que no le pertenece y que, por tanto, no debería ser utilizado para fines particulares, ya que su uso está restringido al servicio público y al cumplimiento de las funciones propias de su cargo.
En definitiva, el uso de un teléfono móvil propiedad del ayuntamiento en la campaña electoral de un partido político podría ser considerado como un acto de malversación de fondos públicos, ya que implica el uso indebido de un recurso público para fines particulares, distintos a los previstos por la ley.
¿Se está produciendo este supuesto en el municipio de Navalafuente?
¿Algún funcionario público está utilizando los teléfonos móviles propiedad del Ayuntamiento en su propia campaña electoral?
¿Algún vecino de Navalafuente ha recibido a través de las Redes Sociales, algún mensaje directamente relacionado con las próximas elecciones municipales, y que provenga de algún número de teléfono oficial?
Si alguien puede contestar afirmativamente alguna de las tres preguntas retóricas anteriores, es evidente que se está produciendo una mala praxis que puede llegar a suponer un delito de malversación.
Desde Hacemos Nava proponemos como única opción, el juego limpio político.
Esta entrada ha sido elaborada por CHATGPT Y Hacemos Nava.
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